Hello again!
Vuelvo para contaros cómo va el inicio del programa, ahora que ya estamos totalmente instalados.
Después de un primer día de toma de contacto, ayer fue el primer día de nuestro horario «habitual» (y es que es un decir, porque cada día aquí es diferente): esta semana hacemos deporte por la mañana y clases por la tarde. El tiempo nos respetó mucho y pudimos disfrutar de fútbol, baloncesto y rounders (una versión del baseball) al aire libre sin problemas – aunque la hierba estaba húmeda y hubo algún que otro resbalón. Los responsables de las actividades diseñaron los equipos para que hubiera representantes de cada nacionalidad, y así pudimos conocer gente nueva.
Por la tarde todos fueron distribuidos en clases según el nivel y también conocieron a gente con la que no habían coincidido todavía, haciendo muchas actividades de conversation.
Para terminar el día, los martes y jueves se organizan actividades de asistencia voluntaria después de cenar en el colegio. Algunos de los chicos y chicas se pasaron y probaron el deporte más querido en Irlanda: el hurling. Aunque no dominan del todo la técnica, ¡ya han hecho sus primeros pinitos! También fue un buen momento para relajarse y disfrutar del sol, que por fin nos honró con su presencia.
Los miércoles son días muy completos: es día de excursión y también de disco. Esta mañana hemos ido a los famosos Cliffs of Moher (‘cliff’ se traduce en ‘acantilado’), un paisaje único muy popular para viajeros locales y extranjeros y también para películas como Harry Potter o Star Wars. El tiempo de hoy ha sido fantástico, y hemos podido disfrutar tranquilamente del paseo y de las maravillosas vistas. ¡Incluso el trayecto en autobús nos ha servido para observar los verdísimos campos irlandeses! Os comparto algunas de las preciosas fotos que hemos podido sacar (¡muchas me las han pasado los propios chicos!) A la vuelta, hemos almorzado en Ennis y retomado las clases por la tarde.
Pero ahí no acaba el día: después de clase, a cenar prontito (como es costumbre aquí) y luego, ¡a la disco! Se hacía en la sala de un hotel de la ciudad que teníamos reservada para los alumnos de la escuela. No os pongo más que una fotito testimonial, porque, como suele pasar, el local estaba bastante oscuro. Como ha hecho un día genial (por favor, ¡que siga así!), entre canción y canción podíamos salir a la terraza a relajarnos y tomar el aire.
Y así están siendo nuestros días en Ennis! Como veis, no paramos ni un momento. Los chicos están aprovechándolo al máximo, conociendo otras culturas, hablando y aprendiendo inglés y sobretodo, ¡disfrutando de la experiencia! Ya os iré contando, aquí y en nuestro Instagram oficial (@ennis2017)
Talk to you soon!